- 1 g de glicerina vegetal
- 0,25 g de goma xantana
- 2,5 g de manteca de karité
- 3 g de emulsionante vegetal
- 1 g de éster vegetal
- 3 g de cetearyl alchool
- 1 g de caprylic capric tryglycerides
- 84,25 g de agua destilada
- 1 g de pantenol
- 1 gramo de aceite de linaza
- 0,5 g de extracto glicérico de ortiga
- 0,1 g de tetrasodium etidronate
- 0,8 g de conservante Nobact
- 0,2 g antimoho
- 0,2 g de aceite esencial de ylang ylang
- 0,2 g de ácido láctico
- papel de tornasol
El verano y el mar nos han regalado un bronceado precioso y un cabello que tiene los reflejos del sol!
Sin embargo, no debemos olvidarnos de cuidar y proteger, además de nuestra piel, también nuestro cabello, para defenderlo del estrés y la sequedad provocados por el sol y la sal, manteniéndolo nutrido, suave y brillante.
De hecho, como ahora sabemos, el cabello es muy sensible a los efectos de las condiciones climáticas, especialmente el sol, el viento y la sal, pero intervenir rápidamente con remedios caseros y algunas recetas específicas es un mimo muy económico y eficaz que, si se hace de manera constante, nos dará una gran satisfacción.
Una mascarilla nutritiva de linaza es una cura que nunca debe faltar en nuestros hábitos de belleza, si se hace con regularidad tendremos un cabello suave, sedoso y nutrido!
Preparación
Mezclar la glicerina y la goma xantana por separado para formar una pasta. Calentar la manteca de karité, el autoemulsionante, el éster vegetal, el cetearyl alchool, el caprylic capric tryglycerides y el agua de proceso al baño maría hasta alcanzar una temperatura de unos 70/75 grados o en todo caso hasta que todos los ingredientes están derretidos. Deja que se enfríe a unos 40 grados. En este punto añadir pantenol, aceite de linaza, extracto de ortiga, tetrasodium etidronate, conservante Nobact, antimoho, aceite esencial de ylang ylang y mezclar todo hasta homogeneizar. Finalmente medir el pH con papel tornasol. Agregar ácido láctico hasta alcanzar pH 5.
Cómo utilizar
Esta mascarilla de linaza es excelente para nutrir el cabello seco y quebradizo del sol y la sal, para eliminar el encrespamiento y hacerlo brillante y sedoso. Inmediatamente después del tratamiento es recomendable secar el cabello de forma natural, sin utilizar planchas porque, al llegar a una temperatura muy alta, corremos el riesgo de quemar el cabello, anulando cualquier efecto positivo del tratamiento.
